Nuestro «SER MUJERES»
Hola a todas y todos, os contamos que estamos trabajando en el Taller de Comunicación y Desarrollo personal de Madrid I. Hemos empezado el trabajo de este trimestre queriendo poner el foco en nuestro SER MUJERES. Estamos dando un paseo por los estereotipos que cada día vemos en la tele y que nos hemos creído y aprendido. Hemos querido identificar algunos comportamientos y mensajes que nos han dado machaconamente y se han quedado en muchas de nuestras cabezas diciéndonos, a modo de “pepito grillo”, cómo tenemos que ser y cómo tenemos que comportarnos. Descubrimos que vemos como excepcionales o raras a otras mujeres que se comportan y se expresan de manera diferente. Vemos que se nos atribuyen pensamientos, sentimientos, comportamientos, profesiones, etc. , por ser mujeres: “EL SESGO DEL GÉNERO”.
Hemos empezado en septiembre con este trabajo. Nos hemos preguntado por la imagen de las mujeres que nos devuelve la sociedad, hemos buscado en revistas y nos hemos dado cuenta de que la mayoría de las mujeres que aparecen son jóvenes, delgadas, saludables, blancas, preocupadas por su pelo, sus ojeras, estupendas y estilosas y la mayoría de ellas o súper independientes o al lado de chicos guapísimos. Nos hemos mirado entre nosotras y hemos buscado “iguales” y… upss, no las hemos encontrado. Así que hemos llegado a la conclusión de que mujeres como nosotras no “existen socialmente”.
Descubrimos que también entre nosotras los roles de género están muy interiorizados, hacemos la comida, cuidamos a los hijos e hijas, atendemos a los maridos… y siempre en estas tareas nos proyectamos. Nos cuesta descubrir que podemos hacer las mismas cosas que los hombres salvo tener bebés biológicamente. Y nos salen fácil cuando ponemos en común todos los verbos que tienen que ver con cuidar, limpiar, cocinar, coser, trabajar… todo en el ámbito de lo doméstico.
Hacemos teatro, para verlo más fácil, más plástico y representamos una situación doméstica del tiempo de nuestras abuelas. De forma libre, solo indicando una situación familiar. Representan:
El marido llega y exige la comida con malos modos y formas, gritando… la mujer calla y se muestra sumisa. Hay un maltrato verbal que se asume como normal.
Y ahora, han pasado 60 años y con la supuesta libertad y empoderamiento de la mujer y su incorporación al mundo del trabajo. la escena que se representa es la siguiente:
“ El marido llega con la niña del parque y pregunta qué hay de comida. La mujer ya ha hecho la comida. Él reparte la comida y comen. “
¿Hay mucha diferencia? Descubrimos que no hay una diferencia esencial, solo de grado. Son los mismos roles y los mismos estereotipos.
La multiculturalidad también hace su aparición. Descubrimos con sorpresa que hay enormes diferencias entre cómo nos vivimos las mujeres en Europa y como se viven las mujeres que provienen de lugares tan distintos a esta vieja Europa como las nigerianas o las latinas de pequeñas ciudades.
Para las mujeres nigerianas los hijos e hijas son una bendición. La familia nuclear no existe como la conocemos aquí. 28 hermanos y hermanas !!!!! tiene alguna de ellas. Nos hacemos conscientes de lo lento del avanzar hacia la igualdad de los hombres y mujeres por la dificultad que todavía tenemos en desagregar roles y género.
Los próximos talleres los dedicaremos a hablar de sexualidad y, por lo hablado hasta ahora, prometen ser talleres muy interesantes y sorprendentes.